Con tan solo 46 años y del modo más inesperado nos ha dejado Dolores O´Riordan, cantante del grupo The Cranberries. Su aparición en el panorama musical de los años 90 resultó ser todo un estímulo para aquellos que siempre hemos sido fans de la música made in Ireland. Nunca olvidaré cuando le descubrí junto a su banda en 1993 gracias al single Linger, un sorprendente y delicado hit a ambos lados del Atlántico que me obligó a comprar su primer vinilo de infinito título e inmensa calidad. Después mostraron su cara más combativa con Zombie y… se convirtieron en eso que ahora se llama “global phenomenon“. Esta canción, su icónico vídeo y el álbum No Need To Argue son uno de los mejores ejemplos de pop-rock mainstream de los 90s. Tras ello, se sucedieron los hits uno tras otro hasta dar forma a ese sonido Cranberries que todos los que vivimos intensamente esa década tenemos en el subconsciente. En mitad del gran éxito que disfrutó el cuarteto, Dolores comenzó a sentirse realmente incómoda con la fama y, al instante, la anorexia y los ataques de ansiedad comenzaron a mermar su salud. Una salud que le ha fallado mientras se encontraba en Londres. En fin. Su voz seguirá siendo la de una década en la que, además, se convirtió en una it girl con guitarra en mano, pelo cortísimo (decolorado o no) y frágil silueta. En mi memoria musical, por siempre, Dolores ocupará un lugar muy especial, sobre todo gracias a estas canciones que, a continuación, he elegido.