Cada vez son más las personas que consumen este cereal cada mañana durante el desayuno porque… la avena es fuente natural de una gran cantidad de nutrientes
Es un hecho constatado, consumir avena todos los días se ha vuelto fundamental para mantener en plena forma una alimentación saludable. Los expertos y expertas en nutrición recomiendan la ingesta de avena a diario para favorecer un mejor estado de salud. Sin embargo, la cantidad que se consume cada día debe ser moderada, de lo contrario, podría terminar provocando el efecto contrario al que se espera.
Tanto su cultivo como su consumo proceden de la antigüedad y, según las OMS, actualmente la mayor producción de avena se ubica en el norte de Europa y en gran parte de América. Tal como ocurre con la mayoría de los cereales a partir de granos, la avena destaca por su gran aporte de carbohidratos. Siendo una de las principales razones por las que este cereal integral se considera un alimento altamente energético. Y además… es muy apreciado por su gran aporte de fibra, proteínas, vitaminas y minerales.
¿Cuáles son los beneficios de tomar avena a diario?
Muchas personas prefieren consumir este cereal todos los días en forma de copos e, incluso, de granos enteros. Sin embargo, en los mercados y tiendas especializadas a granel también es posible comprarlo en formato bebida o a través del salvado, que es la pielecilla con la que está recubierto el grano de la avena y que se separa para utilizarla como suplemento nutricional y añadirla a zumos, batidos, yogures, sopas, masas o incluso ensaladas.
Pero atención… si estás pensando en consumirla todos los días, es recomendable acudir a un especialista en nutrición para obtener más información al respecto. Aun así, no está de más conocer cuáles son los principales beneficios de incorporarla a la dieta habitual. Sobre todo para entender los efectos que se producen en la salud tras empezar a absorber sus nutrientes.
La avena aporta antioxidantes
Porque contiene un compuesto único conocido como avenantramidas. Dicho compuesto solo se encuentra en este tipo de cereal y mejora la capacidad antioxidante. De este modo, se disminuyen los efectos negativos de los radicales libres en el cuerpo y, por ello, se previene el desarrollo de afecciones crónicas y se evita el envejecimiento prematuro.
La avena mejora el proceso digestivo
Este beneficio es, sin duda, uno de los que más popularidad le han aportado al cereal en cuestión. Su gran capacidad para facilitar la digestión se debe a su alto contenido de fibra, un nutriente fundamental que facilita el tránsito intestinal y, además, ayuda a prevenir el estreñimiento.
La avena es una fuente de energía
Los carbohidratos de absorción lenta que posee son un aporte constante y duradero de esa energía tan necesaria para llevar a cabo las tareas diarias. Esta es otra de las principales razones por las que este delicioso cereal se consume durante el desayuno, el momento en el que se necesita un mayor impulso para enfrentarse a la jornada.
La avena aumenta las defensas
¿La principal razón? La presencia del beta-glucano, otro de esos nutrientes esenciales que posee este cereal y que es esencial para aumentar las defensas del organismo. Dicho nutriente ejerce funciones inmunomoduladoras, lo que le permite incrementar la resistencia del sistema inmune ante la mayoría de patógenos invasores.
La avena es un aliado del corazón
Este atractivo cereal es una gran aliado para cuidar de la salud cardiovascular, ya que ayuda a disminuir el colesterol y los triglicéridos. Además, también reduce los marcadores inflamatorios y previene el riesgo de sufrir afecciones cardiovasculares.
La avena disminuye el colesterol malo
Consumir este cereal a diario conlleva un importante aporte de ácido linoleico y fibra soluble. Y ambos compuestos son esenciales para la disminución de los niveles de colesterol malo en la sangre. Ya que la fibra soluble es capaz de capturar el agua soluble, lo que le permite crear una solución viscosa en el interior del intestino.
La avena cuida del azúcar en la sangre
El consumo frecuente de fibra es necesario para prevenir y estabilizar enfermedades como la diabetes. Este nutriente no se absorbe ni se digiere, lo que ayuda a evitar un incremento abrupto del azúcar en la sangre. Por ello, este cereal se recomienda tanto para mantener a raya esta enfermedad que se mantiene al alza en nuestra sociedad.
La avena mejora el aspecto de la piel
Por último, también es bien conocido que este cereal mejora el aspecto de la piel. En este caso, se utiliza de forma tópica, aplicándola directamente sobre la piel. Sus efectos hidratantes y suavizantes son inmediatos, sin olvidar las propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que aportan múltiples beneficios dermatológicos.
