La fundadora de la tienda Friperie Vintage, en Madrid, comparte su visión de la industria de la moda y de la opción segunda mano
Solo han pasado siete años desde que Friperie Vintage abrió sus puertas en el madrileño barrio de San Bernardo (Rodríguez San Pedro, 2, Madrid). Sin embargo, ha sido tiempo suficiente para consolidarse como una de las tiendas de segunda mano más reconocidas y populares de nuestro país. ¿El secreto de su éxito? Xin Jing, su fundadora y la encargada de seleccionar cuidadosamente cada pieza que se pone a la venta.
Posiblemente hayas oído hablar de Friperie Vintage como santuario de los Levi’s 501 y lugar de peregrinación para l@s amantes de estos vaqueros en su versión original o customizados por la propia Xin. Pues bien, a su vez, este pequeño templo second-hand esconde infinidad de tesoros pertenecientes a otras épocas con los que disfrutar de la moda de una forma más respetuosa con el medioambiente.
Friperie Vintage y la moda circular
En los últimos años, el interés por la moda de segunda mano y por las tiendas vintage no ha dejado de crecer. Hasta el punto de convertirse en todo un fenómeno impulsado, en gran parte, por las nuevas generaciones, cuyos hábitos de consumo se inclinan por las prendas y accesorios con historia. Sobre todo, por aquellas piezas consideradas de culto.
Ante el citado fenómeno, conviene no perder de vista la verdadera esencia de este negocio en defensa de la circularidad: se trata de una de las soluciones inmediatas y más efectivas contra la sobreproducción de ropa y sus consecuentes efectos en nuestro planeta. En este sentido, cambiar la percepción que se tiene de la moda usada, tradicionalmente peyorativa, es algo por lo que Xin ha luchado desde que decidió embarcarse en esta aventura.
Fascinados con su trayectoria a través de Friperie Vintage, hemos pedido a Xin que responda nuestro cuestionario ECOLOVER para conocer en profundidad su visión de la actual industria de la moda. Y éstas son sus respuestas.
¿Cómo definirías tu personalidad propia como ecolover?
Me definiría como una “pensadora”, sobre todo a la hora de comprar cualquier cosa. Siempre reflexiono si realmente necesito comprar, por ejemplo, una prenda y cuántas veces la voy a usar. También me definiría como “second, the first”. Es decir, si hay una buena opción que sea de segunda mano, me quedo con ella siempre en primer lugar.
¿Cuál es el mayor reto sostenible al que se enfrenta la moda actual?
El consumo inconsciente y la costumbre. La gente compra mucho y muchas veces. No por necesitad, sino porque, a lo mejor, es una prenda que solo cuesta tres euros y si no le gusta o no le queda bien, lo tira y no duele. A muchas personas todavía les cuesta aceptar la ropa usada y lo entiendo perfectamente, pero la cuestión es que hay que tener conciencia y saber dónde y en qué invertimos nuestro dinero.
¿Es posible transformar la industria de la moda en una economía circular?
Sí, es posible. Y, sinceramente, pienso que ocurrirá, en parte, gracias a tiendas de segunda mano como Friperie Vintage. Hoy en día, por fin, la gente empieza a darse cuenta de que la industria de la moda está dañando la sociedad y me alegra ver que algunas marcas de fast fashion han empezado a lanzar proyectos para reciclar su propia ropa.
¿Qué parte de la sostenibilidad despierta tu lado más activista?
Cuando voy a los almacenes de ropa reciclada para escoger las prendas de Friperie Vintage. Ver las montañas de ropa que ha sido desechada, incluso, nueva con la etiqueta puesta, me paro a pensar… ¿dónde irán a parar todas estas prendas? Los períodos de rebajas también me hacen reflexionar sobre lo mismo, cuando la gente compra bolsas y bolsas de ropa low cost.
¿Crees en la moda como un buen vehículo para promover la solidaridad?
Depende. Mucha gente compra ropa para complacerse a si misma sin que haya ningún propósito solidario detrás. Sin embargo, si se adquiere moda para apoyar a una firma independiente que te guste o porque el beneficio va a alguna organización, entonces sí.
¿Quién o quiénes te inspiran para trabajar respetando el medioambiente?
Desde que era pequeña, mis padres me han educado bastante sobre el ahorro de agua y de luz, clasificar los residuos, reciclar… Y hace años, mi padre trabajó en proyectos y empresas de energía renovable. Creo que las empresas que trabajan de forma ética con el planeta van a generar un impacto muy positivo en el futuro.
¿Cuál es el mayor reto sostenible al que te enfrentas actualmente?
Muchas veces, a quienes queremos contribuir para salvar el planeta nos faltan recursos. Por ejemplo, pese a que trabajo en Friperie Vintage cuando la gente me pregunta dónde se puede vender ropa usada o dónde se puede llevar, no sé qué responderles. Es gente que tiene demasiada ropa y no sabe qué hacer con ella. Las tiendas vintage trabajan con proveedores profesionales y apenas compran a particulares. Muchas iglesias y organizaciones no aceptan donaciones de ropa porque ya tienen demasiada. Y los contenedores de reciclaje de ropa suelen estar demasiado llenos y descuidados, con prendas por el suelo a su alrededor. Entonces me pregunto, ¿qué se puede hacer para mejorar todo esto?
¿Cómo contribuyes a fomentar el consumo consciente, especialmente de moda?
No compro por precio ni compro en rebajas. Prefiero ahorrar el dinero para comprar una prenda clásica de buena calidad que pueda tener mucha vida, aunque su precio sea elevado. En Friperie Vintage, los y las clientas, a veces, quieren comprar muchas prendas y mis compañeras y yo nunca les animamos a quedarse todo. Les convencemos para que compren las que van a usar más. Tampoco ofrezco devolución, con el fin de que tomen una decisión consciente sobre si es necesario realizar una compra antes de que paguen.
¿Qué libro, documental o película ecofriendly recomendarías?
Me gustan mucho los documentales de National Geographic. Cuando ves la naturaleza y los animales, piensas en que es una pena que seres vivos tan bonitos se estén extinguiendo por culpa de la contaminación y del cambio de climático.
¿Qué actividad al aire libre prefieres para desconectar y relajarte?
Salir a dar un paseo. Vivo en el centro de Madrid y casi voy andando a todas partes. Mientras… me gusta pensar en Friperie Vintage, mirar a mi alrededor, buscar ideas e inspiración por la calle…
¿Cuál es tu momento wellness favorito de la semana?
Los paseos de domingo con mi chico. Los dos somos autónomos con un negocio propio y trabajamos non-stop de lunes a sábado. Ambos apreciamos mucho poder disfrutar de un domingo de relax, sin planes, para poder ir a pasear por donde sea.
¿Crees que tu propio armario se podría considerar sostenible?
Sí. Diría que el 80% de mi armario es de segunda mano, tanto la ropa, como los bolsos y los zapatos. Ahora, cada vez que quiero comprar algo, primero echo un vistazo en plataformas de resale, como Vinted o Vestiaire Collective.
¿Cómo se puede fomentar el estilo de vida zero waste?
Por ejemplo, acostumbrándote a llevar tus propias bolsas de tela para hacer la compra. También reciclando y clasificando bien la basura de casa o reutilizando las cajas de envíos, entre otros pequeños gestos.
¿Un último mensaje que te gustaría transmitir en defensa de la sostenibilidad?
Una de las cosas que más escucho trabajando en Friperie Vintage es que mucha gente piensa que la ropa de segunda mano es solo para los pobres y no es así. Usar y reciclar ropa o cosas de segunda mano es un estilo de vida que ayuda a dejar de comprar compulsivamente poco a poco, así como a disfrutar de una vida más sencilla.
