Esta planta medicinal destaca por propiedades que son idóneas para tratar trastornos cutáneos y otras molestias relacionadas con músculos y articulaciones
Sus flores son delicadas, de un intenso color amarillo; sus pétalos tienen una forma similar a los de las margaritas; y crece, principalmente, en las montañas del centro y del este de Europa, en Norteamérica y en Siberia. Hablamos del árnica, una planta con interesantes propiedades medicinales que se utiliza desde hace siglos.
Además de los lugares antes indicados, es posible encontrar el árnica paseando por las montañas del norte de España y… en el INCI de algunos productos de cosmética y de productos corporales utilizados en el ámbito deportivo, ya que por algo es conocido como «el santo patrón de músculos y hematomas». A continuación, te contamos todos los beneficios de esta bonita planta silvestre, sus formas de uso y también las precauciones para aprovechar todas sus propiedades de forma segura. ¡Toma nota!
Una fuente de principios activos
El árnica no es una planta única, existen diferentes variedades que pertenecen a la familia Asteraceae. El Árnica Montana es la variedad más utilizada con fines cosméticos y medicinales por sus cerca de 150 sustancias activas, entre las que se encuentran diferentes aceites esenciales, flavonoides, lactonas y ácidos como el salicílico.
El conocimiento de estas propiedades medicinales no es reciente. Ya en el siglo XII se utilizaba el árnica como un remedio natural que era muy habitual para tratar las varices y el reumatismo. Años más tarde, y tras varios estudios clínicos, se descubrieron sus eficaces propiedades antiinflamatorias, analgésicas y antimicrobianas, lo que le valió el citado apelativo digno de un santoral.
El árnica y sus múltiples beneficios
Las sustancias activas del árnica hacen que sea una planta muy beneficiosa para su uso medicinal y, puntualmente, para el uso cosmético, donde se utiliza en forma de extracto de árnica, un activo que se obtiene de las flores de la planta. Éstos son sus principales beneficios para el organismo:
- Alivia el dolor y la inflamación de músculos y articulaciones.
- Mejora los síntomas de la artritis.
- Estimula la circulación sanguínea.
- Mejora los hematomas y alivia las molestias que provocan.
- Estimula la regeneración celular.
- Alivia los dolores de cabeza y las migrañas.
- Acelera la cicatrización de rozaduras y rojeces.
- Mejora problemas cutáneos como el acné y los eczemas, calmando la inflamación y el dolor.
- Previene el envejecimiento prematuro.
- Alivia el dolor y la picazón de las picaduras de insectos.
Precauciones a la hora de aplicarlo
Los beneficios del árnica se aprovechan a través de su aplicación tópica, en formato crema, gel, aceite o spray. Los productos formulados con este ingrediente natural se aplican en la zona inflamada o dolorida para aliviar las molestias. En homeopatía se ingiere por vía oral, en concentraciones muy pequeñas y diluidas, pero se trata de una práctica desaconsejada por los expertos porque puede resultar tóxica.
Por todo ello, la utilización del árnica debe hacerse bajo supervisión de un o una profesional y, en ningún caso, en las siguientes circunstancias:
- Durante el embarazo y la lactancia.
- En zonas de la piel con heridas abiertas.
- Si se es alérgico o sensible al árnica.
- Si se toman medicamentos anticoagulantes, antiinflamatorios o analgésicos.
- No se recomienda su uso en bebés ni en niños.
Una planta en peligro de extinción
Otro punto a destacar sobre esta planta medicinal tan utilizada a nivel terapéutico es la grave situación por la que atraviesa en la actualidad. El árnica, actualmente, es una planta en peligro de extinción. Con el objetivo de preservarla, hay organizaciones que se han movilizado para desarrollar acciones que la protejan y aseguren su proliferación en sus zonas autóctonas.
Una de ellas es la World Wildlife Fund (WWF) que, en colaboración con la poderosa empresa de cosmética sostenible Weleda, ha desarrollado un proyecto sostenible en uno de los entornos naturales del árnica, los Montes Cárpatos de Rumanía.
3 productos clean con árnica
Si eres deportista, sufres de piernas cansadas, sueles tener contracturas o dolores articulares o quieres tratar hematomas que hayan aparecido como consecuencia de un accidente o un tratamiento o intervención, este ingrediente natural es perfecto para ti. Aquí tienes tres productos de clean beauty que contienen árnica y con los que podrás comprobar su poder curativo.
Aceite Huille d’Arnica de SOWÉ
Este aceite ecológico prensado en frío de SOWÉ contiene un 20% de árnica y es perfecto para tratar los hematomas y los dolores musculares. Su textura ligera y fluida facilita el masaje y hace que penetre rápidamente en la piel. Además, este aceite también puede aplicarse hasta en las zonas más delicadas, como el rostro, para tratar los hematomas que surgen, por ejemplo, tras una someterse a una intervención de cirugía estética.
Aceite de masaje con árnica de Weleda
Este aceite corporal de la firma Weleda para masaje es 100% vegetal. Contiene una mezcla de aceites en la que destaca el extracto de flores de Árnica Montana. Es muy recomendable para preparar los músculos antes de practicar ejercicio y para favorecer su recuperación posterior. También es útil para aliviar las contracturas y molestias musculares a diario.
Crema árnica de Taüll Orgànics
El árnica ecológica cultivada en el Pirineo, la proteína de trigo y la menta son los ingredientes principales de esta crema de Taüll Orgànics. Es ideal para aplicar en zonas contracturadas, como los hombros o la espalda, con molestias articulares, y para aliviar las piernas cansadas. Además, su agradable aroma a menta piperita y su textura suave, convierte su uso en un momento muy placentero.