En el ámbito de las fragancias se continúa produciendo una silenciosa revolución en defensa de lo natural frente a lo artificial. Y el proyecto parisino ARPA STUDIOS se sitúa al frente de quienes desafían el arte olfativo para ir más allá con la intención de romper con los esquemas preestablecidos.
El proyecto se presentó en 2020 como una marca multidisciplinar del perfumista Barnabé Fillion que combina aroma, música, arquitectura e imágenes en una experiencia inmersiva que lo abarca todo. Ahora, Arpa Studios ya es una realidad con web propia y no solo se comercializa través del que fuera su primer aliado, el prestigioso portal Dover Street Market.
Barnabé es muy conocido por su trabajo previo como perfumista para la marca Aesop, donde ha creado todas las fragancias y sus primeras velas, así como por sus colaboraciones con la firma Lemaire e instituciones como la Fundación Guggenheim. Tras ello, su propia colección de Arpa Studios es tan cautivadora como inicialmente se prometió y surge de sus viajes personales, así como de narraciones históricas.
Los primeros tres aromas (ya hay otros tres en camino) se llaman Arco Spettro, inspirado en los cráteres de baño de ácido en Dallol, Etiopía; Fosforo, un aroma de petitgrain e iris inspirado en las aguas que rodean la isla de Kyushu, Japón; y Recedere, una mezcla terrosa de regaliz, neroli y yeso que pretende recrear un estudio de yeso en el Bosque Azul belga.
El lanzamiento de Arpa Studios se retrasó por la pandemia, pero sus consecuencias han aportado al proyecto un nuevo significado. En el transcurso de los últimos dos años, ha habido una oleada de proyectos que fusionan fragancias con otras experiencias sensoriales con fines tanto artísticos como terapéuticos.
El uso de la relajación sensorial o de la «nostalgia fisiológica» se ha convertido en una tendencia que cotiza al alza dentro del ámbito wellness. A través de ella, las personas buscan una forma de transformar su espacio doméstico en una zona de meditación sin obstáculos materiales de por medio.
En este sentido, Arpa Studios se centra en la sinestesia (experimentar un sentido a través de otro) y en lo que podemos aprender al fusionar nuestros sentidos. “En Arpa trabajo con los materiales naturales más puros. Los escucho para obtener transmisiones de longitudes de onda extraconscientes. Se trata de evitar un futuro de artificialidad en favor de una poesía alegre«, ha comentado Barnabé en la web de Wallpaper.
El resultado final es una experiencia que, como se comentó al principio, va más allá de donde llegan las fragancias habitualmente: “Todo lo que hago en perfumería es visual y está relacionado con mi propia sinestesia, para transmitir no solo un recuerdo sino una textura. Siempre corro tras una imagen borrosa que se vuelve más enfocada con el tiempo«.
Todo suena muy abstracto olfativamente hablando… porque, en parte, lo es. Pero las sinergias que rodean Arpa Studios completan un proyecto multidisciplinar. Por ejemplo, Barnabé ha creado una serie de esculturas y discos con la artista Anicka Yi y con el dj francés Pilooski.
El grafismo de Arpa Studios está diseñado por un peso pesado del Memphis Group, Nathalie du Pasquier, y su espacio de trabajo ha sido creado por el arquitecto interno de Aesop, Jean-Philippe Bonnefoi. Por último, los frascos de las fragancias en edición limitada han sido soplados a mano por el artista Jochen Holz. Incluidos los del recomendable Discovery Kit, con las tres fragancias en versión mini para permitir una primera (y más económica) toma de contacto con este particular universo.
Es obvio que Barnabé se sabe rodear bien. Y, por ello, Arpa Studios es una propuesta que transgrede los límites creativos para sorprender, respetando el medioambiente a través de un proceso de creación 100% artesanal. Para entender mejor cómo funciona… no dudéis en pulsar play en el vídeo que la edición taiwanesa de Marie Claire le dedicó recientemente.
