Cada vez son más habituales las propuestas artesanales inspiradas por la naturaleza. ¿Podríamos definir esta tendencia in crescendo como arte sostenible? Tendría sentido, teniendo en cuenta que también se usan materiales respetuosos con el planeta para crearse. De este modo, se cierra un círculo que no genera ningún impacto negativo sobre el medioambiente.
A continuación, ECOLOVER os recomienda descubrir el inusual talento de diez artistas expert@s en arte sostenible que encuentran su inspiración tanto en el ámbito vegetal como en el animal para conseguir resultados excepcionales.
Semillas de papel reciclado teñidas a mano fluyen por los paisajes y retratos esculturales de esta artista de origen surcoreano. En cada una de sus obras meditativas, Ilhwa muestra una gran variedad de profundidades, colores y texturas, utilizando pliegues visibles entre segmentos más verticales. Debido a que las dimensiones de las semillas varían, sus composiciones fluctuantes cambian de color y textura según la perspectiva del espectador. Ilhwa fotografía con frecuencia sus piezas en aceras y lugares públicos para compartir las imágenes en Instagram, creando un inspirador contraste entre los entornos urbanos y su arte sostenible.
El actual arte sostenible no conoce límites. Atención a las oníricas escenas de cuento que anidan entre (no en) las portadas de los libros alterados por Isobelle. A través de ellos se descubre un universo caprichoso en el que flora y fauna convergen para regocijo de aquell@s que admiran la ilustración de estilo victoriano. Residente en Bratislava, Isobelle talla las páginas de sus novelas en intrincados laberintos de papel con preciosos bosques y prados. Su proceso de tallado y dibujo depende tanto del objeto físico como de la narrativa prevista, y tarda entre tres semanas y tres meses en completar una propuesta de arte sostenible que destaca por su minuciosidad y delicadeza.
En las esculturas orgánicas de este escultor ubicado en Bend (Oregon) las raíces o ramas retorcidas de los árboles se fusionan con las ranuras ornamentadas, los patrones y el dorado de los marcos de los cuadros. Darryl comienza cada trabajo conectando piezas de madera recuperada con objetos decorativos encontrados. Para conseguir que todo lo que parecía dispar se extienda orgánicamente dedica horas a tallar, lijar, pintar y teñir meticulosamente cada obra. Además, a menudo conserva algunos de los musgos o líquenes originales, enfatizando más el contraste entre las superficies finamente talladas de los marcos y las texturas ásperas de la madera en bruto.
Esta artista aprovecha los ritmos naturales de la isla norteamericana de Martha´s Vineyard para transformarlos en cautivadoras vasijas de porcelana. Los patrones naturales de mareas cambiantes y estaciones cambiantes iluminan las delicadas esculturas de su propuesta de arte sostenible. Respondiendo a los cambios de la vida en la isla, Jennifer se inspira en el entorno circundante y en sus formas orgánicas, desde «la caracola agrietada en la playa que revela su espiral perfecta hasta la vaina de algodoncillo que estalla en el campo«. Es increíble cómo sus obras artesanales capturan cambios sutiles y dramáticos, imitando olas, vendavales, humo y llamas.
A través de su Ars Botanica Atelier esta artista residente en Madrid propone cuadros y otras creaciones artísticas realizadas con flores, hojas y ramas recogidas en el campo y parques durante sus paseos… sola o con Coco, su adorable perrita yorkie. Tras ser recogidos, estos materiales son secados y prensados artesanalmente para que su arte sostenible embellezca el día a día. Amelia también realiza obras por encargo, con medidas especiales o contenido expresamente elegido y compuesto para quien lo solicite. Y de cara al futuro próximo… objetos inspirados en la naturaleza como cajas botánicas o ramas decoradas completarán su particular universo.
Desde el estudio de su casa cerca de Bristol, Lisa crea sus hipnóticas esculturas acuáticas, con detalles que imitan la vida marina y los elementos naturales. Sus pequeños cuencos están repletos de crestas y protuberancias similares a plantas, mientras que sus esculturas en forma de órgano humano se decoran con puntuaciones aparentemente interminables que imitan arrecifes de coral, flores, minerales, musgo y líquenes. Lisa renuncia al uso de sellos, hojas de textura o moldes y trabaja con pequeñas herramientas, asegurándose de que ninguna pieza sea idéntica. De este modo, su arte sostenible, en impoluto blanco o con vibrantes pigmentos, es 100% único.
Una vez más, la delicadeza es la protagonista de una propuesta de arte sostenible basada en los bordados botánicos de esta artista con sede en Los Angeles. Moteados con nudos franceses, materiales brillantes y pedazos de musgo, reproducen las texturas flexibles del suelo del bosque a través del uso de fibras y cuentas. Julia también usa terciopelo, lana, fieltro y lentejuelas teñidos a mano para agregar una variedad de tonos que van desde el verde esmeralda hasta el amarillo dorado: “Trato de capturar la complejidad de todos los diferentes tipos de musgo. Me atrae su naturaleza suave y calmante”. Todas sus obras se encuentran en su recomendable espacio online Natural Minimalism.
Desde el estudio de su casa en los Países Bajos, esta artista suelda vívidas representaciones de vidrieras de colores con monarcas, mariposas pavo real y polillas españolas. Primero busca en fuentes etimológicas información sobre colores, ubicaciones de venas y antenas, y después esboza un patrón para rastrear y cortar el frágil material y unir las piezas de los delicados especímenes. Al igual que en la vida real, sus criaturas son delicadas y emiten una vibrante luz en los espacios que habitan. De este modo, el arte sostenible que surge del vidrio resulta terapéutico.
De los animales plasmados en vidrio pasamos a los creados con papel reciclado. La artista Maude White crea piezas únicas e hiperrealistas con flores, cabellos trenzados y animales como protagonistas. Haciendo innumerables incisiones diminutas en hojas con una cuchilla de tamaño 11, Maude parte de una fotografía y crea un primer boceto para mantener las dimensiones generales. Luego selecciona cuidadosamente la ubicación del primer corte y, a continuación, cada corte se expande hacia afuera, asegurándose de que la pieza mantenga su integridad cuando esté completa y no se deshaga. Porque no su objetivo final es crear arte sostenible que perdure, lógicamente.
Y para terminar… un camello aventurero, una oveja con un suéter y un venado que es rápido en el dibujo son solo algunos de los personajes que forman parte del universo de este artista ubicado en Buenos Aires. Formado como ilustrador, Hugo talla sus figuras poniendo mucho énfasis en los detalles de la veta para acentuar las articulaciones y los músculos y, a menudo, incorporando otros elementos, como lápices. En su arte sostenible utiliza piezas de desecho que otros han tirado, lo que le permite crear una gran variedad de tonos y texturas. El proceso creativo de cada animal finaliza con la caricaturesca adición de ruedas, anteojos o esquís. Y el resultado… te atrapa.
