El arte del bordado artesanal regresa gracias a una nueva generación de expert@s en la materia. Entre ellos, destaca el delicado y precioso trabajo de la japonesa YUMIKO HIGUCHI. Nacida en 1975, la artista reside en Tokio. Después de graduarse en la Tama Art University, Yumiko trabajó como diseñadora de bolsos hechos handmade. Así fue como comenzó a desarrollar su talento innato para el diseño y la producción de moda artesanal.
Fascinada por las infinitas posibilidades del bordado, comenzó a especializarse en él como artista en 2008. El trabajo se realiza a mano en todas las fases del proceso de creación de sus obras, desde el diseño inicial hasta el acabado final. Su principal propósito es crear obras que sean exclusivas e innovadoras, capaces de romper moldes en el tradicional ámbito del bordado. Las fotos que anhelaba, el paisaje que ardía en sus ojos, los pensamientos nostálgicos… son algunos de los sentimientos personales de la artista que inspiran su trabajo.
Además de delicados tejidos, Yumiko también ha creado mascarillas, pajaritas, monederos y colgantes. Sutiles accesorios que transmiten la minuciosidad con que esta artista trabaja una técnica ancestral. En Japón, el bordado artesanal se valora de un modo muy especial y una nueva generación de artesan@s está renovándolo para las nuevas generaciones de fashion lovers. Entre ellas, también destaca el nombre de USAGI MISO, experta en trasladar la tranquilidad del paisajismo japonés a través de minúsculos bordados.
La naturaleza, sin duda, es la gran protagonista de unos bordados de ensueño que son auténticas obras de arte. Gracias a ellos y una vez más, se reivindica lo artesanal frente a la producción en cadena. Se defiende el diseño y la manufactura con «denominación de origen». Una moda que surge del pasado y se reinterpreta en el presente para perdurar en el futuro.