Salitre de la playa, cloro de la piscina, cambios bruscos de temperatura… Muchos son los factores externos que dañan el cabello en verano. Si bien nuestra piel se beneficia de la síntesis de vitamina D, siempre y cuando esté protegida con una buena y respetuosa crema solar, el pelo no goza de la misma suerte, ya que no sintetiza ninguna vitamina.
A pesar de lo anterior, no hay que alarmarse. Siguiendo una rutina capilar adecuada frente a la radiación ultravioleta y cuidando con mimo el cuero cabelludo se puede llegar a otoño con una melena sana y radiante. Sin embargo… poco se habla de lo que NO hay que hacer con nuestro cabello en verano y que, en muchas ocasiones, hacemos sin darle la mayor importancia.
¿Qué es lo que NO debemos hacer con nuestro cabello en verano?
- Evita cepillarlo si está húmedo en la playa o la piscina. El cabello húmedo está en su estado más débil y, lejos de la creencia popular que anima a retirar la sal o el cloro tras un chapuzón, cepillarlo solo empeorará su estado. Piensa que el cabello en verano está sometido al sol, el cloro o la sal y súmale que se fibra capilar se debilita mucho con la humedad.
- Evita colorearlo antes de irte de vacaciones. Estamos de acuerdo en que el color siempre es una apuesta segura para lucir una melena impoluta. Sin embargo, cuando sabemos que toca plan piscina o plan playa… se recomienda experimentar con tintes a la vuelta de las vacaciones. ¿El motivo? El sol, el salitre del mar y el cloro oxidan los pigmentos de los mechones, ya que la cutícula del pelo está ligeramente más abierta. Por ello, los rubios tienden a ponerse verdes y los castaños se vuelven naranjas.
- No te bañes con horquillas o diademas metálicas. Las razones son obvias. El metal podría oxidarse dañando gravemente el cabello.
- Huye de los aceites capilares. El sol tiende a quemar la piel cuando le aplicamos aceite. Algo parecido ocurre si se usa aceite capilar antes de ir a la playa o a la piscina. Por el contrario, es recomendable usar protectores capilares en spray. Éstos, además de actuar como barrera protectora frente a la radiación ultravioleta, refrescarán tu sufrido cabello en verano.
Rutina capilar para mantener sano el cabello en verano
En primer lugar, para una protección completa de la piel y del cabello, se recomienda la nutricosmética solar. “Se recomienda comenzar a tomarla con los primeros rayos de sol de la primavera. Conviene hacerlo una semana antes de exponerte a la radiación ultravioleta en tus vacaciones en la playa. Y se toma durante todo el verano e incluso en septiembre y octubre», nos cuenta la farmacéutica Belén Acero, titular de la Farmacia Avenida de América y especialista en dermocosmética.
A continuación, modifica tu rutina capilar habitual e incorpora productos que añadan un extra de hidratación a tu cabello en verano. El sol tiende a secar la fibra capilar e, incluso, fruto del calor, se produce una sudoración excesiva del cuero cabelludo y hay una mayor pérdida de agua. Por ello, la mejor manera de mantenerla sana es elevar su nivel de hidratación al máximo. La línea InBloom de la firma NATURALMENTE, creada con ingredientes 100% botánicos y sostenibles, es ideal para conseguirlo.
Esta línea incluye el Champú Lush, un limpiador que reestructura el pelo seco y dañado, limpia muy bien la piel del cuero cabelludo recuperando su ph natural y elimina por completo los restos de otros productos. La mascarilla capilar Lush Moisturizing Mask, con efecto hidratante instantáneo que restaura la elasticidad natural del pelo aumentando la suavidad y luminosidad. Y por último, el spray de proteínas Lush Velvet Elixir, que fortalece la capa cuticular del tallo y protege de fuentes de calor y agentes atmosféricos.
Para completar la rutina del cabello en verano debes incorporar, sí o sí, un protector solar para el pelo. Reaplícalo cada vez que salgas del agua y, si estas en la playa, recuerda aclarar el pelo con un spray de agua dulce para retirar la sal. Esto hará que la cutícula no se dañe tanto. El Velo Protector Para El Cabello de AVEDA es una excelente opción, ya que, además de proteger tu pelo, no daña el ecosistema marino, gracias a sus filtros UVA/UVB procedentes de aceites de corteza de canela y gaulteria.
