Manuel García comenzó con su firma GARCIA MADRID en 2006 y, como afirma en su web oficial, lo hizo «observando y escuchando lo que le pedían sus clientes, amigos y amigas, anticipándose a sus necesidades«. La propuesta de menswear (y por qué no de womenswear) que surgió ha combinado, hasta hoy, lo mejor de la sastrería tradicional… con un toque contemporáneo.
Defensor a ultranza de la producción artesanal y gran experto en la selección de tejidos con origen natural y máxima calidad, Manuel se muestra firme ante su compromiso con la transparencia, la sostenibilidad medioambiental y la responsabilidad social. Por eso, sus prendas de menswear son siempre made in Europe y provienen de España, Italia o Portugal.
Conocerle en persona y sentir la serenidad que transmite como diseñador de moda es algo poco habitual en un ámbito laboral tan saturado de egos. Manuel se ha ganado el respeto y el cariño de sus clientes y de la profesión siendo fiel a sus buenas maneras y a su sutil sentido del humor. Por todo ello, sus respuestas a nuestro cuestionario ECOLOVER son, ante todo, honestas. Pasen… y lean.
¿Cómo definirías tu personalidad propia como Ecolover?
Activista y optimista. GARCIA MADRID como marca tiene en su ADN un compromiso real con el medioambiente, porque creemos en diseñar menswear sostenible y en un mundo mejor para tod@s.
¿Cuál es el mayor reto sostenible al que se enfrenta el ámbito del menswear actual?
Es una industria que, como muchas, arrastra conductas poco o nada respetuosas con el planeta. Cambiarlas desde una conciencia medioambiental es posible. Y tod@s podemos hacer algo cada día para mejorar la situación.
¿Es posible transformar la industria del menswear en una economía circular?
Estoy convencido. No deberíamos esperar a cambiar movid@s por una situación de crisis, deberíamos cambiar ya el chip y actuar en consecuencia. Está en nuestras manos.
¿Qué parte de la sostenibilidad despierta tu lado más activista?
Todo lo relacionado con la eliminación de stocks, con adecuarnos mejor a la demanda para no generar mercancía que no tiene salida. Y también me preocupa mucho llevar a cabo un consumo más eficiente de la energía, que debería ser de origen 100% verde.
¿Cómo reaccionas ante un evidente caso de greenwashing?
Convenciéndome de que hay que hacer las cosas bien, de verdad, evitando hacer el ridículo ante un mercado cada vez mejor informado y menos transigente con la hipocresía.
¿Crees en la moda como un buen vehículo para promover la solidaridad?
Cualquier medio es válido. Pero la moda refleja siempre la cultura y la ética de la sociedad de cada época. Depende de nosotr@s aprovechar este vehículo para promover mensajes con valores que sean positivos.
¿Quién o quiénes te inspiran para trabajar respetando el medioambiente?
No tengo ídolos, prefiero pensar en la humanidad como un todo. Un pequeño planeta azul habitado por gente que es capaz de crear cosas maravillosas y que tiene el derecho a seguir disfrutando de un conjunto de ecosistemas interconectados, lleno de posibilidades y fuente de vida.
¿Cuál es el mayor reto sostenible al que te enfrentas actualmente?
Intentamos convertir cada reto en una posibilidad. Ahora mismo, el reto es conseguir crear nuestra propuesta de menswear con materiales reciclados y sin huella de carbono.
¿Cómo contribuyes a fomentar el consumo consciente de moda?
Adelantándome a una demanda que está cada vez más informada y es más consciente. Y ofreciéndole soluciones diferentes, creativas y ecológicas.
¿Qué libro, documental o película ecofriendly recomendarías?
Yo recomendaría aprovechar un fin de semana largo y escapar al campo, recuperar nuestra esencia. Apagar el móvil, desconectarte de todo y conectar con la naturaleza. Aprender de ella, sentir la necesidad de proteger una cosa tan buena y necesaria para tod@s.
¿Qué actividad al aire libre prefieres para desconectar y relajarte?
Volver a mi pueblo, entender lo que significa estar en los cerros de Úbeda… pero en el buen sentido. Me encanta perderme en el bosque para poder encontrarme.
¿Cuál es tu momento wellness favorito de la semana?
Caminar mucho, aunque sea atravesando la ciudad para ir a trabajar o para volver a casa. Siempre se aprende algo por cada camino.
¿Crees que tu propio armario se podría considerar sostenible?
Para mí es fácil, porque sólo me visto con menswear de GARCIA MADRID.
¿Cómo contribuyes a fomentar un estilo de vida zero waste?
Cada pequeño gesto cuenta. Y nuestros clientes siempre reciben encantados todas nuestras sugerencias que van en este sentido. No se trata solo de venderles menswear que no necesitan o que no les va a resultar realmente práctico.
¿Un último mensaje que te gustaría transmitir en defensa de la sostenibilidad?
La sostenibilidad es rentable, a largo, a medio y a corto plazo. Se trata de conseguir vivir en un planeta vivo, sano, capaz de sorprendernos con sus infinitas e increíbles posibilidades. Lo importante es que podamos seguir disfrutando tod@s junt@s de ellas.
