Y, por fin, el frío hizo acto de presencia. El otoño ya se siente y el próximo invierno… se presiente. Ante la bajada de temperaturas radical que se ha producido, en ECOLOVER apostamos por defender el organismo con varias INFUSIONES que poseen múltiples propiedades beneficiosas.
Algunas de ellas son bien conocidas, pero otras… no tanto. Sus resultados están más que demostrados y l@s expert@s en la materia aseguran que estas infusiones son, junto con una buena y sana alimentación, la mejor manera de plantar cara al mal tiempo que está realmente por llegar.
A continuación, nuestro top ten de infusiones preferidas para adquirir en lugares tan terapéuticos como los Herbolarios Navarro y, después, degustar en esa taza de porcelana que tanto has echado de menos durante el verano más largo de nuestras vidas.
1. TOMILLO
Para el frío que cala los huesos la mejor solución son las infusiones de tomillo. Ideales para reforzar el sistema inmunológico gracias a una de las sustancias que contienen: el timol. Ayudan a aliviar algunos síntomas de la gripe y a combatir la tos, los dolores de garganta y de cabeza. ¡Ah! Y también son idóneas para mejorar la digestión.
2. COLA DE CABALLO
Además de calentar el cuerpo, este tipo de infusiones también ayuda a eliminar los líquidos que no necesitas. Concretamente, contribuye a la eliminación de toxinas gracias a que contiene sílice y potasio. Otro de sus beneficios es sin duda las propiedades diuréticas que posee.
3. REGALIZ
Para prevenir los efectos del fuerte resfriado una infusión de regaliz es muy adecuada. Además, también ayuda a evitar la irritación de garganta. Contiene propiedades antibacterianas que son muy eficaces para combatir los efectos del frío y ayuda a mantener los niveles de defensas bien altos. ¡Como debe ser!
4. TILA
En el ámbito de las infusiones, la tila es perfecta para tomar antes de ir a dormir porque ayuda a conciliar el sueño y a entrar en calor. Con niveles de stress altos, los efectos de un catarro se agravan y las defensas bajan. Además, también es muy útil para calmar cólicos y evitar insuficiencias renales.
5. CANELA
Aparte de lo apreciada que es en el ámbito gastronómico, la canela también dispone de propiedades digestivas y ayuda a estimular la circulación. En materia de infusiones, se utiliza principalmente para preparar el Chai tea o Masala chai, un té que proviene de la India y ha conseguido triunfar en todo el mundo gracias a sus múltiples beneficios para la salud.
6. SALVIA
La salvia se caracteriza por ser rica en vitaminas A y C, además de tener propiedades bactericidas y antiinflamatorias. Cualidades que contribuyen a mejorar la salud de nuestro cuerpo y ayudarlo a combatir infecciones y catarros. Las infusiones de salvia son idóneas para parar un resfriado inminente y regular la temperatura corporal.
7. TÉ VERDE CON MENTA
Aunque el té verde se utiliza para adelgazar y para embellecer la piel, posee otras propiedades que vienen al caso. Es rico en vitamina C, por lo que ayuda a prevenir los catarros y a combatir el frío. Además, que es expectorante y, por ello, contribuye (y mucho) a mejorar los problemas que el sistema respiratorio padece cuando se pierde la batalla ante los ubicuos virus.
8. JENGIBRE
Ante el catarro común, ayuda a eliminar la congestión gracias a su poder antitusivo, antibiótico y antiinflamatorio. También es ideal para fortalecer el sistema inmunitario y aliviar los síntomas de la gripe. Y es fácil de combinar con otras infusiones para sumar propiedades, por ejemplo, con té blanco para cuidar del aparato digestivo.
9. HINOJO
Bien sabido es que el fruto del hinojo es aconsejable para mejorar la digestión gracias a sus propiedades antiespasmódicas, carminativas, desintoxicantes o diuréticas. Pero además… también es expectorante y fluidificante, por lo que la infusión de esta planta es beneficiosa para la expulsión de congestión acumulada en casos de bronquitis asociada a los clásicos catarros del otoño e invierno.
10. MALVA
La infusión de malva está considerada como uno de los remedios más eficaces para aliviar los síntomas del resfriado agudo: congestión nasal, picor en la garganta y fuertes ataques de tos con efectos irritativos. Porque, entre sus múltiples propiedades, está su poder expectorante y antiinflamatorio. Para suavizar su sabor medicinal, se suele acompañar con anís verde, porque la endulza.
