El actor BRAD PITT acaba de combinar dos de los mayores placeres de la vida: el vino y el cuidado de la piel. Si bien es obvio que no posee un evidente perfil de experto beauty, sí tiene experiencia como enólogo a través de su bodega Château Miraval en la Provenza. Pues bien, esta bodega es el lugar de donde surge su firma de belleza sostenible LE DOMAINE SKINCARE.
En primer lugar. Esta propuesta es cualquier cosa menos que «otra más» creada por un o una celebrity hollywoodense: “Le Domaine Skincare no pretende ser una marca más de celebrities”, afirma el propio Brad en un comunicado de prensa. Y en segundo lugar… el premiado actor ha decidido que los precios de su firma de belleza estén al alcance de todos los públicos y su target sea genderless, es decir, tanto para hombres como para mujeres interesad@s en una rutina facial sin precedentes.
En este sentido, Brad ha comentado para British Vogue: “Creo que hay que ser lo más inclusivo posible. Tal vez, los hombres, necesitamos más ayuda para aprender a cuidarnos la piel. Sobre ello, creo que aprendí mucho de las mujeres con las que he estado. Por eso, para Le Domaine Skincare hemos elegido un aroma muy neutro, fresco y sutil».
Pero… ¿cómo surgió realmente el proyecto Le Domaine Skincare?
El actor reclutó a la familia Perrin, que trabajó con Brad para restaurar el Château Miraval hace una década, cultivando las vides de la finca y construyendo una sólida asociación. Impulsados por el mismo deseo de preservar la Tierra y su ecosistema, de salvaguardar las riquezas de nuestro mundo para las generaciones futuras, Le Domaine Skincare y su enfoque distintivo del cuidado de la piel fueron un paso natural para ambas partes. Y así, tras 15 años de investigación, el Dr. Pierre-Louis Teissedre, especialista en vinos, los Perrin y Brad Pitt cofundaron la firma.
“Nuestro objetivo es imitar los ciclos orgánicos de la naturaleza. No hay desperdicio en ella. Todo lo que sobra o se desecha se convierte en alimento para otra cosa. Este sistema circular ejemplar es la inspiración para la creación de Le Domaine Skincare”, explica Brad en la web de la firma. Por ello, los ingredientes clave son las uvas recolectadas por los agricultores de la empresa. Este enfoque local de la naturaleza tiene un efecto directo en la eficacia de los productos, debido en parte a la frescura única de los ingredientes naturales que se recogen directamente de la Tierra, pero también a sus propiedades tan específicas.
¿Cuándo surgió la idea de combinar cuidado de la piel y naturaleza? “No lo habríamos hecho a menos que sintiéramos que había algo válido aquí, algo original, algo que funciona. Me envían productos de belleza todo el tiempo y… ugh. Es todo lo mismo para mí. Pero este último año he estado probando Le Domaine Skincare y me sorprendieron mucho los resultados. Eso hizo que valiera la pena seguir adelante”, ha comendo Brad Pitt en British Vogue.
¿Cuáles son los principios activos más destacados de Le Domaine Skincare?
La firma Le Domaine Skincare se ha diseñado para retardar el proceso de envejecimiento, con la ayuda de dos ingredientes patentados: GSM10, un activo que combate la oxidación y las enzimas que descomponen el colágeno, y ProGR3, una combinación de antioxidantes (que incluye el resveratrol derivado de la vid).
¿Los resultados? Una piel más firme, luminosa, elástica y tersa, pero también hidratada. Los cuatro productos creados hasta el momento tienen formato refill. Se llaman The Serum, The Cream, The Cleansing Emulsion y The Fluid Cream y su ya comentado sutil aroma ha sido creado por un perfumista de Grasse utilizando azahar, cedro amaderado y sándalo.
«Soy un gran admirador de cada uno de los productos y, por ejemplo, uso The Cream todos los días. Me gusta mucho la textura porque es cremosa, hidrata y se absorbe muy rápido y hace que mi piel se sienta mucho más protegida bajo el sol de California”, añade Brad en su press release.
Si bien es probable que esta línea de cuidado de la piel no vaya a convertirte en Benjamin Button… hay que destacar que realmente posee el poder de las uvas como garantía científica a la hora de cuidar la piel. Y además, en el estante de tu baño, su packaging sostenible y reciclable quedará es-tu-pen-do.
