A través de su marca sostenible, rescata técnicas ancestrales de su país para crear productos artesanales con un gran valor artístico
Hace más de una década que Lula Mena creó su marca homónima de diseño sostenible con el fin de revalorizar la herencia cultural de El Salvador. Orgullosa de sus raíces, decidió potenciar su talento para recuperar las tradiciones olvidadas y, sobre todo, para dejarse llevar por el corazón realizando una labor social.
Su amor por el arte surgió a los 8 años, cuando su abuela, Noy, le regaló un set de acuarelas. A partir de ese momento, la pintura se convirtió en el lugar seguro de Lula Mena, donde todavía se refugia para expresar sus pensamientos más profundos. Además, desde joven ha querido impactar positivamente a nivel medioambiental y social, siguiendo este sabio consejo de su abuela: “Hacer lo mejor con lo que tienes, donde te encuentres y con quién estás”.
Tras descubrir la maravillosa simbiosis que puede surgir entre el diseño y la artesanía, Lula Mena ha logrado destacar en el ámbito sostenible de la decoración made in Latam por méritos propios. ¿Su principal objetivo? Preservar las técnicas ancestrales a través de creaciones contemporáneas y vanguardistas.
Sus inicios: el teñido con añil
Lula Mena estudió diseño artesanal en la Universidad Dr. José Matías Delgado, donde ya tuvo la oportunidad de relacionarse con comunidades de artesanos: “Fue algo mágico comprender la gran labor que ellos y ellas realizan al contar historias a través de piezas u objetos, transmitiendo el legado ancestral y la identidad cultural de generación en generación”.
Durante sus primeros seis años como diseñadora trabajó en un proyecto nacional dedicado a la reactivación de la siembra para la producción del teñido con añil, ese colorante azul proveniente de la planta Jiquilite. El Salvador solía ser uno de sus mayores productores en la época colonial. Sin embargo, con el tiempo este precioso pigmento natural fue remplazado por colorantes artificiales.
Lula Mena, en su aprendizaje para lograr revivir dicho proceso de teñido, tomó clases con un maestro japonés. De este modo y posteriormente, logró capacitar a más de 100 artesanos y artesanas con la intención de reincorporar este tipo de técnica heredada del pasado. Y al mismo tiempo… aprovechó para explorar cada rincón de su país y disfrutar de la naturaleza: “Tengo un lugar muy especial en Miramundo, se llama Chalatenango y está rodeado de paisajes hermosos que me sirven para inspirarme en la diversidad de formas, colores y texturas de mi región”.
Lula Mena, una mujer empoderada
Uno de los momentos que más marcó la vida de Lula Mena fue convertirse en madre. Esta etapa le ayudó a entender el gran rol que ejercen las mujeres como creadoras de vida. Y por este motivo, se ha dedicado a trabajar de manera responsable con artesanas de zonas vulnerables de El Salvador, a quienes capacita y empodera para que sean autosuficientes.
Asimismo, considera que impactar de manera positiva en la vida de una mujer tiene un efecto multiplicador para sus hijos, su familia y su comunidad. Por tal razón, una de sus misiones es continuar empleando a mujeres campesinas mientras preserva técnicas ancestrales como, por ejemplo, el tejido en telar de palanca.
Innovación y sostenibilidad… su ADN
Gracias a su labor tanto creativa como social, Lula Mena ya ha logrado triunfar en más de 60 países y aspira a conseguir llegar a más. Para ello, intenta reinventarse constantemente y ofrecer propuestas renovadoras, sin perder nunca de vista los principios de la sostenibilidad y del comercio justo.
Sus creaciones abarcan el ámbito de la joyería, los bolsos, los textiles y los objetos decorativos para el hogar. La materia prima de Lula Mena proviene de la naturaleza, pero también de los residuos que produce la contaminante civilización: “Como diseñadora ética, busco promover el cambio para construir un mundo más verde. Por eso, utilizo materiales naturales o de desecho, como semillas, escamas de pescado e hilos de cobre provenientes de neumáticos de llanta. Con todo ello creo piezas exclusivas de diseño sostenible”.
También es muy destacable que la diseñadora salvadoreña tuvo la oportunidad de exhibir en el Museo de Arte de El Salvador su primera exposición de piezas artísticas llamada Nido, donde la creatividad, la artesanía y la innovación formaron un mix & match perfecto.
Sin duda alguna, Lula Mena es una diseñadora que promueve la moda y el estilo de vida conscientes, transformando todo lo que manipula en algo bello con propósito. De este modo, ha logrado posicionarse como un referente indiscutible en el actual diseño latinoamericano, contribuyendo tanto a nivel social como medioambiental. Y reivindicando siempre el legado artesanal de El Salvador para luchar por un planeta mejor.
